domingo, 30 de octubre de 2011

¿Quiere el nuevo iPhone 4S? Cuidado con las ofertas de las operadoras


Conocerse a uno mismo es fundamental en muchos aspectos de la vida. Unos son trascendentales y otros no lo son tanto..., pero pueden ayudar a ahorrarse unos cuantos cientos de euros.
Eso es lo que sucede con el nuevo y ya ultrafamoso móvil de Apple, el iPhone 4S. Hay estudios que aseguran que parte del éxito de la compañía de la manzana radica en que los usuarios establecen una relación emocional con los dispositivos, algo cercano al enamoramiento. Pero a la hora de decidirse a comprar el iPhone es importante dejar los sentimientos al margen, ser fríos y sacar la calculadora.
Con esa máquina y un cuidadoso estudio de los hábitos al teléfono de cada uno se pueden ahorrar hasta 900 euros. ¿Cómo? Teniendo cuidado con las ofertas de Movistar, Vodafone y Orange que regalan el iPhone 4S de 16 gigas a los clientes que vienen de fuera de la compañía, pero a cambio de un alto compromiso de gasto mensual.
Es cierto que la propuesta es tentadora. En la tienda de Apple, el mismo modelo cuesta nada menos que 599 euros. En teoría, un ahorro de este tipo es difícil de cuestionar.
Opción clásica: operadoras tradicionales
El problema es que para conseguir este regalo, el cliente debe comprometerse a un gasto mensual de 79 euros con Orange, de 84,9 euros con Movistar y de 99,9 euros en el caso de Vodafone. Todo ello con una condición añadida: hay que estar al menos 18 meses de permanencia; 24 meses si el contrato se firma con Vodafone.
Un sencillo cálculo dice que el usuario que consiga su iPhone 4S gratis con una de estas ofertas acabará pagando 1.422 euros a Orange, 1.528 euros a Movistar y 1.798 euros a Vodafone al término del periodo de permanencia (todos los precios están sin IVA y a Vodafone se le ha aplicado también la permanencia de 18 meses, para facilitar la comparación).
Con estas cifras en la mano, el futuro comprador del iPhone debe volver a sacar la calculadora para descubrir cuánto le costaría comprarlo libre en el mercado y apuntarse a otro operador. El desembolso inicial son 599 euros y a partir de ahí tiene que elegir la compañía.
Opción alternativa: Yoigo y móviles virtuales
Una opción sería irse con la cuarta operadora que tiene red propia, Yoigo, que ofrece una tarifa plana de 39 euros al mes que permite hacer llamadas a cuatro céntimos y navegar 500 megas. ¿Total? 1.301 euros al cabo de 18 meses, lo que supone un ahorro que va de 120 a 500 euros con respecto a las tres compañías celulares clásicas. Si usted cree que no necesita hablar tanto, hay otra propuesta para llamar a seis céntimos el minuto y navegar 500 megas por 27 euros al mes. Así se reduciría la factura global a 1.085 euros y se aumentaría el ahorro comprado.
Y luego están los operadores móviles virtuales, entre los que se ha seleccionado una operadora integrada con más tiempo en el mercado y una tarifa plana, Jazztel, y dos de las recién llegadas, Másmovil y Pepephone.
En el caso de la primera, la comparativa es más fácil, porque dispone de dos tarifas planas de voz móvil y datos, una de 26,95 euros al mes, 300 minutos de conversación y 500 megas y otra igual, pero de 600 minutos, que cuesta 36,95 euros al mes. Con esos datos, la compra del iPhone 4S 16 GB y 18 meses de consumo con esta compañía costarían al cliente entre 1.084 euros y 1.264 euros. El ahorro va aumentando: puede llegar a 714 euros.
La comparación con Másmovil y Pepephone es más compleja, ya que no se han utilizado tarifas planas. Pero es en estas compañías donde se ve que un adecuado estudio de los hábitos de cada uno puede llevar a un ahorro importante.
Para hacer los cálculos, se ha tomado el perfil de un usuario medio en España, que consume 115 minutos de móvil al mes y manda 12,5 SMS, según dicen los datos de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) referidos a 2010. A eso habría que sumarle una tarifa plana de internet móvil de 500 megas, calcular el gasto en establecimiento de llamada con la hipótesis de que la duración promedio de las conexiones es inferior a tres minutos y multiplicar los minutos por la tarifa de estas compañías (tres céntimos para Másmovil y 2,9 céntimos para Pepephone). El resultado es que un iPhone y 18 meses con estas compañías salen por poco más de 900 euros, es decir, el ahorro se multiplica y llega a 890 euros en el mejor de los casos.
Lo más importante: estudie su consumo
Estas simulaciones tienen una crítica evidente: no se están comparando consumos iguales. Y es cierto, las ofertas de Movistar, Vodafone y Orange permiten consumir muchos más minutos de conversación y más megas de navegación. Por eso es vital conocerse a uno mismo. ¿De verdad lo necesita?
Si la respuesta es sí, adelante, porque entonces realmente será un ahorro para usted. Si la contestación es negativa, busque otras opciones, porque incluso con las grandes operadoras hay precios mucho más baratos para el iPhone 4S.
Porque Movistar, Vodafone y Orange también permiten adquirir el iPhone más barato que libre en una tienda (pero más caro que cero euros) a cambio de tarifas mensuales más ajustadas. Por ejemplo, Movistar cobra 349 euros por el móvil a cambio de que el usuario se gaste 34 euros al mes entre consumo móvil y tráfico de internet. El coste en 18 meses sería de 961 euros, todavía más caro que Másmovil y Pepephone y con unas posibilidades menores de consumo, pero mucho más barato que su propuesta del iPhone a cero euros. Vodafone, por su parte, lo vende por 259 euros a cambio de gastarse 40 euros al mes, con una tarifa que, en este caso sí, incluye más minutos de tráfico y SMS que las de sus rivales virtuales.
También debe estudiar qué tipo de consumo de voz hace, porque en muchos casos se puede usar Skype o Viber para comunicarse, lo que elimina el sentido de tener altos compromisos de gasto de tráfico celular tradicional. ¿Para los mensajes? WhatsApp. En estos casos, lo que tendrá que buscar es un contrato que permita una elevada descarga de datos y olvidarse de la voz.
Y recuerde que el iPhone que consiga a través de una oferta de permanencia será cautivo. Eso significa que tendrá que liberarlo si quiere usarlo después con otro operador y eso a veces da problemas técnicos. En teoría, las operadoras están obligadas a liberarlo, pero no siempre lo hacen.
Temas a tener en cuenta: microsim
Hay un último punto que conviene saber. El iPhone 4S no lleva una SIM normal, de las de toda la vida. La tarjeta que hay que meter en este terminal es más pequeña, lo que se llama una microsim, y no todas las operadoras la tienen.
La mayoría la da con solo pedirla (aunque a cambio hay que pagar, en algunas ocasiones), pero Yoigo, por ejemplo, no ofrece este servicio a sus abonados. "Para las microsim es necesario establecer un canal logístico específico que es muy costoso a menos que esperes volúmenes muy altos, así que aunque lo tenemos en consideración no hemos tomado ninguna decisión todavía", explica un portavoz de Yoigo. Para el resto de las compañías, incluidas la mayoría de las operadoras virtuales, no debe de ser tan costoso, porque sí que cuentan con este servicio para sus clientes.

Articulo extraido de Cincodias.com

martes, 18 de octubre de 2011

Lo peor en el sector de vivienda y construcción está por venir

Promotores, constructores, representantes del sector financiero, economistas y expertos celebraron ayer en Madrid el XXX Coloquio Nacional de la patronal APCE con el objetivo de debatir qué se puede hacer para que la actividad constructora y promotora de vivienda pueda salir de su actual letargo. Si el mensaje que pretendía transmitir es que mientras haya demanda de casas hay esperanza, lo cierto es que ese tibio optimismo no encontró muchos adeptos.

Unos rebajaron la demanda estructural de pisos de nueva construcción a apenas 200.000 unidades los próximos años. Otros advirtieron que mientras no vuelva a fluir el crédito no habrá recuperación posible. Y los más reconocieron que para que se normalice el acceso a la financiación aún resta mucho por hacer. Conclusión: malos tiempos para la promoción y construcción de casas, porque todo apunta a que lo peor está todavía por llegar.

Y es que el calendario de la recuperación que plantea el consejero delegado de Analistas Financieros Internacionales (AFI), Ángel Berges, no puede ser más descorazonador. Dice Berges que las entidades financieras españolas podrían tardar hasta 45 años en deshacerse de su cartera de suelo, cuyo valor asciende a unos 49.000 millones de euros (el 70% de los activos inmobiliarios que tienen procedentes del stock), siempre y cuando se mantenga el actual ritmo de transacciones, y entre 4,5 y 5 años en drenar su excedente de viviendas, que supone otros 21.000 millones. Según AFI, el valor total de los activos atascados en los balances del sistema financiero español asciende así a unos 70.000 millones de euros, con cifras de junio pasado.

Berges afirmó que, a la vista de estos números, "el sector de la construcción y el financiero se han convertido en hermanos de sangre, y nunca mejor dicho", puesto que su destino a día de hoy va aparejado. En su opinión, el gran reto al que se enfrentan bancos y "excajas" es cómo lograr la "movilización" de esos stocks.

En este sentido, el consejero delegado de AFI coincidió con el presidente de la patronal APCE, José Manuel Galindo, en señalar que existe una "absoluta necesidad de plantear la creación de vehículos", en forma de "aparcamientos" o "bancos malos", para atajar el problema. Ambos recordaron que en España se ha producido una "sistemática oposición" a este tipo de soluciones y aseguraron que "hay que volver a plantearlas con cierta urgencia" e incluso que, tras los "enormes problemas" en los que se ha visto envuelta la banca francesa y la deuda italiana, esta posibilidad "está ahora mucho más cerca que en junio".

Por su parte, el economista jefe para economías desarrolladas del Servicio de Estudios de BBVA, Rafael Domenech, aseguró que si no hay sobresaltos, el peso de la inversión inmobiliaria sobre el PIB podría empezar a recuperarse a mitad de 2012 y cifró en 300.000 casas la necesidad estructural de vivienda, cifra que el catedrático de Sociología de la Complutense Jesús Leal redujo a 200.000.