lunes, 18 de abril de 2011

Trabajamos más, cobramos menos

Las estadísticas desmienten tópicos sobre el mercado laboral.

Se nos tacha de poco productivos, pero trabajamos mucho. El Banco Mundial acaba de publicar un informe según el cual los españoles en edad de trabajar dedican el 19% de su tiempo al empleo remunerado, frente al 16% de países tan productivos como Alemania, Holanda o Dinamarca. Podrá discutirse el grado de implicación o la intensidad del desempeño, pero lo cierto es que los trabajadores españoles echan horas en el tajo y cobran mucho menos que sus homólogos europeos.

Según un estudio publicado esta semana por la consultora Michael Page, el sueldo medio en España se limita a 22.000 euros anuales, frente a los 35.000 del conjunto de la Unión Europea. En otros términos, los empleados de la UE-25 ingresan, por término medio, un 59% más que los de España. De hecho, solo los trabajadores de Grecia, Portugal y Polonia reciben una remuneración inferior.

Ese dato choca con el de la renta per cápita, utilizada a menudo como baremo del bienestar económico de los ciudadanos de un país. Según los cálculos de Eurostat, la oficina estadística comunitaria, España alcanzó en 2009 el 103% de la renta media de la UE, y quedó a apenas un punto porcentual de la de Italia y a cinco de la de Francia.

Si llegamos a ser casi tan ricos como italianos o franceses, ¿cómo puede ser que cobremos mucho menos? Por supuesto, el cálculo tiene truco: la renta per cápita es una variable meramente orientativa, que básicamente divide la actividad económica (PIB) entre el número de habitantes, que no son los únicos receptores de dicha renta (faltan en la ecuación las empresas y el Estado). Llevado al extremo del chiste, si yo me como dos pollos y usted ninguno, por término medio nos habremos comido uno cada uno.

El caso español se explica porque los trabajadores participan en mucha menor medida de la renta generada en su país que sus colegas europeos. El sesgo productivo hacia las empresas se refuerza por la menor presión fiscal española respecto a la comunitaria, que limita la participación de los impuestos indirectos en el reparto de las rentas. Después de que la economía española viviese su década prodigiosa (ahora, cada vez menos), el país pudo llegar a considerarse casi rico, pero no tanto sus ciudadanos.

martes, 12 de abril de 2011

Real Madrid-Barça: El orgullo en juego… y 30 millones de euros

La imagen del campeón saldrá favorecida, lo que catapultará sus ingresos de publicidad y merchandising.

El orgullo pesará más que el dinero en el próximo 'rally de derbis' entre el Real Madrid y el Barcelona. En estos cuatro partidos hay en juego, de forma directa, 25 millones de euros. Pero el equipo que logre alzar la 'Orejuda’ (como popularmente se denomina a la Copa de Europa), podría elevar esta cantidad hasta 30 millones, ya que disputaría otros dos torneos: la final de la Supercopa y la Copa Mundial de Clubes.
En el mejor de los casos, la remuneración obtenida por esta ristra de victorias deportivas rondaría entre el 7-8% de su negocio anual.


¿Cómo se logran estos ingresos? El que pase a la final de la Champions League recibirá una recompensa de 5,6 millones. Y si la gana, se embolsaría 9 millones. A esta cantidad se le sumaría el 'market pool' (cuota de mercado) que cada club recibe en función de los acuerdos alcanzados con las televisiones que emiten el torneo en su país. Este botín no se conocerá hasta la conclusión del torneo, pero el Barça ya recibió más de 8 millones en 2009 (cuando se proclamó campeón).

Copa del Rey
El dinero que los chicos de Mou o los de Guardiola obtendrán por conquistar la Copa del Rey será mucho más modesto. El verdadero ganador de este derbi será la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), ya que el vencedor del trofeo del ‘KO’ apenas se embolsa 1 millón de euros. Sin embargo, el organismo presidido por Ángel María Villar ingresará en sus arcas una cifra que podría alcanzar los 15 millones, según el informe elaborado por Esteve Calzada, especialista en marketing deportivo de Prime Time Sport.
El beneficio que obtienen los equipos participantes en la Copa de España procede de la recaudación en taquilla, de las televisiones y de los patrocinios en los estadios. Y de esa cantidad, un porcentaje acaba en manos de la RFEF. Sólo el ganador del torneo recibe el premio adicional de un millón. De hecho, Barcelona y Real Madrid deberán abonar a sus jugadores una cantidad superior a ésta en concepto de primas, si se hacen con el título.
Recapitulando: Ganar la Copa del Rey, más la Champions, la Supercopa y la Copa Mundial de Clubes, sumaría un monto aproximado de 30 millones.

El vencedor: ¿Venderá más camisetas?
Ahora bien, quien salga como vencedor de esta pelea en cuatro ‘rounds’ podrá reforzar su negocio a medio plazo. El Real Madrid es el club con mayores ingresos del mundo (438,6 millones en la temporada 2009-2010), que se nutren principalmente de la venta de entradas (129,1 millones), los derechos televisivos (158,7 millones) y la publicidad y merchandising (150,8 millones), según el informe Football Money de Deloitte.

El Barça es el segundo de este ránking, con una facturación total de 398 millones (97,8 de la taquilla, 178,1 de la televisión y 122 de patrocinios y venta de productos oficiales).

La imagen internacional del campeón saldrá claramente favorecida tras estos cuatro encuentros. Un impulso que se notará en la venta de camisetas y en el prestigio logrado de cara a futuros patrocinadores. Ése es el aspecto que, el próximo año, podría dar el vuelco definitivo al listado de los clubes que hacen más caja del mundo. Y en esta ‘clasificación’ el Madrid sí que defiende el liderato.

sábado, 9 de abril de 2011

Claves para contratar depósitos sin sorpresas

Hay que tener en cuenta tipo de interés, plazo, vinculación, comisiones y penalizaciones. Los estructurados son una opción más arriesgada, aunque garantizan el capital.

Los depósitos siguen siendo los productos estrella de las oficinas bancarias. Aunque actualmente el ahorro se remunera con menos alegría que en 2010, todavía se pueden encontrar ofertas atractivas. Sin embargo, es conveniente mirar las condiciones con lupa para no llevarse sorpresas, en el momento de percibir los intereses.

Rentabilidad real
Lo primero que hay que tener en cuenta a la hora de formalizar una imposición a plazo fijo es la diferencia entre la TAE (Tasa Anual Equivalente) y el TIN (Tipo de Interés Nominal). La TAE permite determinar cuál es la inversión más rentable de entre varias alternativas de inversión, ya que homogeneiza, sobre una base anual, el tipo de interés y otro tipo de comisiones, por lo que el resultado es más exacto.
La TIN y la TAE coinciden cuando el depósito es al plazo de un año y el pago de intereses es a vencimiento. Sin embargo, cuando el mismo depósito contempla el pago trimestral de intereses, la TIN es ligeramente inferior. Ello se debe a que el tipo nominal no tiene en cuenta la reinversión de los intereses, en cambio la TAE, sí. Es decir, cuando el cliente recibe anticipadamente el pago de intereses, éstos no se reinvierten, por lo que la tasa disminuye.
Cuando el plazo de los depósitos es superior al año, algunas entidades optan por anunciar sus depósitos subrayando el interés nominal, algo que induce a equívoco. Por ejemplo, Santander ofrece actualmente el Depósito Avanzado 24, sólo para dinero procedente de otras entidades. Se trata de una imposición a dos años que las oficinas del banco anuncian con un interés del 6,5%. Esta tasa es nominal; la TAE del producto es, en realidad, del 3,29%. Caja Extremadura también comercializa un depósito a 18 meses en el que ofrece un tipo del 5,51%. En términos de TAE, la remuneración es del 3,67%.
Junto a la tasa en la que se expresa la remuneración de cada producto, los particulares han de tener en cuenta el interés medio que obtendrán al finalizar el plazo. Por ejemplo, Popular, con su Depósito Gasol, da un 10% nominal durante le primer mes. El resto del periodo, un 2,59%. En conjunto, la TAE media se sitúa en el 3,25%. Openbank ha comenzado a ofrecer un depósito a 15 meses que da un 4% los tres primeros meses y un 3% los doce meses restantes. La TAE media es del 3,20% TAE.

Ojo con los crecientes
En los últimos meses han proliferado en el mercado ofertas de depósitos crecientes, cuya rentabilidad va incrementándose trimestre a trimestre o año a año. Hay que tener en cuenta que si el cliente cancela el producto antes de la fecha del vencimiento, se pierde la mayor parte de la rentabilidad.
CAM acaba de lanzar un Depósito Creciente Plus, abona en el primer trimestre un interés del 2,55%, el segundo trimestre, del 2,14%, y el tercero y cuarto, un interés del 4,40% y 5,75%, respectivamente. De este modo, al finalizar el plazo, la tasa media es del 4%. El producto permite retirar el capital en cualquier momento sin penalización, pero ha de tener en cuenta que son los dos últimos trimestres los que pagan una rentabilidad más generosa.
Los depósitos crecientes son especialmente populares en los plazos más largos, de en torno a tres ejercicios. BBVA, La Caixa, Sabadell, Bankia y Unicaja figuran entre las entidades que comercializan imposiciones a un plazo de tres años, en los que el tipo de interés va incrementándose en cada ejercicio.
Bankia, por ejemplo, abona el primer año un 3,5%, el segundo, un 4,35% y el tercero, un 5,5% En conjunto, la TAE media es del 4,25%.

Sin vinculación
Aunque los clientes se interesan especialmente por depósitos sin ninguna vinculación –no exigen la contratación de productos adicionales–, la contratación de un depósito requiere abrir una cuenta asociada en la que se abonan los intereses que genera el producto.
El Banco de España, considera una mala práctica bancaria “el cobro de comisión por mantenimiento de la cuenta cuando este servicio sea una exclusiva imposición de la entidad como, por ejemplo, en el caso de que se obligue al cliente a domiciliar los reembolsos de un crédito en una cuenta con la propia entidad, y la cuenta no se utiliza para otros fines”.
Aun así, gran parte de las entidades cobran comisión por el mantenimiento de la cuenta. En este sentido, depende del cliente negociar con la oficina que le retiren esta comisión. En el caso de que la entidad se muestre inflexible, deberá calcular la rentabilidad neta que obtendría, restando el coste de la cuenta.
Por otro lado, algunas firmas exigen la domiciliación de la nómina o la contratación de productos adicionales, como seguros, fondos de inversión o tarjetas para remunerar el ahorro con más generosidad. De este modo, logran compensar el margen que pierden con el extratipo del depósito. En términos generales, estos productos no son interesantes para el particular, salvo que éste ya hubiese detectado la necesidad de contratar el producto adicional.

Estructuras complejas
Los depósitos estructurados o combinados son difíciles de entender o, al menos, resulta complicado conocer qué rentabilidad van dar. Estos productos colocan parte de la inversión en una imposición a plazo fijo tradicional, y el resto del capital, en una estructura a plazos de en torno a tres años, cuyo rendimiento depende de la evolución de algún activo, como un fondo de inversión, índice, una cesta de valores cotizados, alguna materia prima, etcétera.
La última oferta de estas características es el Depósito Doble Pole Position 100 de Sabadell y ActivoBank. Ofrece un rendimiento fijo del 4% TAE a 12 meses sobre el 50% del importe del depósito y el 100% de la revalorización media de la acción de Telefónica para 60 meses. Además, el cliente obtiene una rentabilidad adicional si Fernando Alonso o Lewis Hamilton se proclaman campeones en el Mundial 2011 de Fórmula 1.
BBVA ofrece el 5% TAE a seis meses para la mitad de la inversión y el 50% restante se coloca en el fondo BBVA 5-100 Eurostoxx a cuatro años y un mes. Caja Vital, por su parte, ha estrenado recientemente el Depósito Combi 59. Presenta una rentabilidad fija del 7,5% de interés nominal a 30 meses (2,94% TAE) para el 50% de la inversión y para el 50% restante la posibilidad de obtener el 50% de la revalorización del índice DJ Eurostoxx50-E (de las bolsas europeas).
La rentabilidad total que ofrecen estos depósitos es difícil de calcular, pero el cliente ha de contemplar la posibilidad de que el rendimiento del patrimonio colocado en la parte de remuneración variable sea cero. No obstante, en un depósito, el capital está siempre garantizado y no puede arrojar pérdidas.
Hay que puntualizar que, en ocasiones, algunas firmas llaman depósitos a vehículos de inversión que, aun teniendo similitudes, no lo son.
El Depósito 90/10 que Santander ha lanzado recientemente para importes desde 50.000 euros remunera el 90% de la inversión al 4,5% TAE a 12 meses. El 10% restante está vinculado al comportamiento de las acciones de Inditex, BBVA y Telefónica a en un periodo de tres años. Esta parte de la inversión no está garantizada, por lo que puede generar pérdidas para quien lo contrate, rebajando el TAE del 4,5% previsto para el 90% del patrimonio.

El plazo, importante
A medida que aumenta el plazo al que se formaliza un depósito, la banca puede elevar la retribución al cliente, con un menor deterioro de su margen de interés. Bancos y cajas están poniendo en foco en productos con vencimientos más largos, que les permite lograr una base de pasivo más estable.
En el contexto actual, en el que la inflación ha iniciado una escalada alcista, puede ser arriesgado tomar decisiones de inversión a largo plazo, por lo que los expertos aconsejan no exceder el horizonte temporal de un año. Por otro lado, el cliente tendrá valorar si puede prescindir de su capital durante todo el plazo. Si necesitase retirarlo anticipadamente, la entidad le aplicaría una penalización que, en ningún caso, podría superar los intereses acumulado hasta la fecha.
Es decir, nunca podrá recibir menor importe del que colocó. Es recomendable que los particulares que vayan a colocar una cantidad importante de dinero la distribuyan en dos imposiciones. De este modo, en el caso de cancelación antes del vencimiento, parte del patrimonio no se vería afectado.
Las cláusulas de penalización también varían considerablemente de una entidad a otra. Dos depósitos pueden ofrecer el mismo tipo de interés, pero la laxitud o severidad de la penalización puede hacer mucho más atractivo uno u otro.

A saber
Dos depósitos con el mismo tipo de interés no son iguales. Vigile, sobre todo, las condiciones de cancelación. Éstas no podrán superar los intereses devengados.
Compare los productos tomando como referencia la TAE. El interés nominal a plazos superiores a dos años induce a equívoco. Los depósitos estructurados tienen el capital garantizado, pero la rentabilidad que obtendrá de ellos es una lotería.
Negocie con su banco la comisión por la cuenta asociada al depósito. Según el Banco de España es ‘mala praxis’ que le carguen el coste. Estudie el plazo del que puede prescindir de su dinero. Si tiene que retirar el capital antes de vencimiento, perderá intereses. En estos momentos, la inflación juega en su contra.
En su oficina le ofrecerán adquirir productos adicionales para elevar el rendimiento del depósito. Estudie si le interesa ya que es posible que el coste del nuevo producto se coma su rentabilidad.
Los intereses que perciba variarán ligeramente en función de cómo se abonen (trimestral, anual, por adelantado o al vencimiento). Tributan al 18% o 21%, en función del importe.

Máxima protección
En un momento de incertidumbre sobre el devenir del sistema financiero, los depósitos bancarios son un refugio para el inversor ya que están garantizados por ley, a través del Fondo de Garantía de Depósitos. Más allá de que algunas entidades estén en el punto de mira por un balance deteriorado, los depósitos están asegurados hasta 100.000 euros por titular y DNI.
En el caso de que alguna caja tuviese que ser intervenida, los particulares no se verían afectados. Sin embargo, por prudencia, es recomendable que los clientes que dispongan de una cantidad superior a los 100.000 euros invertida en depósitos, fraccionen dicho importe en diferentes entidades u otorguen la titularidad del producto a otra persona.

Artículo extraido de Expansión al parecerme muy interesante.

lunes, 4 de abril de 2011

Marzo suma 34.406 parados más

El paro supera los 4,3 millones, pero la afiliación crece por primera vez en ocho meses.

Los datos de desempleo del mes de marzo revelan que continúa el deterioro del mercado laboral español, el talón de Aquiles de una economía que parece dar señales de lenta recuperación, aunque la afiliación a la Seguridad Social mostró una evolución positiva después de ocho meses de caídas.

El paro registrado en los Servicios Públicos de Empleo subió en marzo en 34.406 personas, el 0,8% respecto al mes anterior, hasta alcanzar los 4.333.669 desempleados, lo que supone un nuevo máximo. En un año el paro ha aumentado en 167.056 personas, el 4,01%. Pero el incremento de marzo es ligeramente inferior al de 35.988 personas registrado el mismo mes de 2010. En términos desestacionalizados, el aumento del desempleo fue de 33.441 personas, hasta los 4.162.187 parados.

Sube la afiliación por primera vez en ocho meses

No obstante, la Seguridad Social registró su primer crecimiento en ocho meses al ganar 45.660 afiliados en marzo, lo que situó en 17.392.754 la media de afiliados al sistema, un 0,26 % más que en febrero.
En el el último año el número de afiliados ha caído un 1,15%. El Régimen General, donde cotiza la mayoría de los empleados por cuenta ajena, registró un aumento de 53.478 afiliados en marzo, el 0,41% más que en febrero, y sumó 13.124.238 ocupados.

Trabajo auguró que las estadísticas del mes de marzo mostrarían indicios de creación de empleo tras un arranque del año negativo. El ministro del ramo, Valeriano Gómez, explicó que tradicionalmente marzo es un mes de transición en el que el desempleo evoluciona de forma variable, en función de la fecha en la que caiga la Semana Santa. Gomez aseveró que lo importante es que la "senda de recuperación" del empleo se alcance cuanto antes, y aseguró que el Gobierno mantiene su previsión que se empiece a crear empleo neto en España a finales de este año.

El sector servicios sigue liderando las mayores subidas del paro

El paro subió en marzo en todos los sectores, pero especialmente en los servicios, con 14.836 desempleados más (+0,59%). Le siguieron el colectivo sin empleo anterior, que sumó 10.526 parados (+2,77%); la agricultura, con 5.698 desempleados más (+4,14%); la industria, que registró 1.710 parados más (+0,34%), y la construcción, con 1.636 desempleados más (+0,22%). Casi un tercio del incremento de personas en situación de desempleo correspondió al colectivo sin empleo anterior. Asimismo, aumentó en ambos sexos, aunque más entre las mujeres, con 18.770 nuevas paradas (+0,87%), frente a un incremento del desempleo masculino de 15.636 hombres (+0,37%), situándose el total de mujeres en paro en 2.183.421 y el de varones, en 2.150.248. En un año el paro masculino aumentó en 36.683 (1,74%) y el femenino, en 130.373 (el 6,35%).

Entre los jóvenes menores de 25 años, el desempleo aumentó en 12.830 personas, el 2,73%, mientras que entre las personas de más edad subió en 21.576, el 0,56%. En cuanto a los extranjeros, el paro se incrementó en 11.527 personas respecto a febrero (el 1,83%) y en 26.573 en un año (4,31%), con lo que el número de parados en este colectivo se situó en 642.893.
En marzo, el paro aumentó en todas las comunidades autónomas, con la excepción de Baleares, donde bajó en 1.535 personas, Castilla y León (-1.420), Navarra (-561) y Asturias (-332).

Contratación

Se registraron en el Inem un total de 1.154.903 contratos, un 2,89% menos que en igual mes de 2010. De ellos, el 9,62% -111.118 contratos- fueron de carácter indefinido, con un descenso del 5,78% en tasa interanual. Pero la contratación acumulada en los tres primeros meses del año fue de 3.282.340, lo que supone 14.558 contratos más (el 0,45%) respecto al mismo periodo del año pasado. En cuanto a los contratos indefinidos, en el primer trimestre se firmaron 308.214, cifra que representa una reducción de 5.526 (el 1,76% menos) sobre el mismo periodo de 2010.

Respecto a los contratos, la secretaria de Estado de Empleo, Mari Luz Rodríguez, destacó que desde la aplicación de la reforma laboral el número de contratos de fomento de la contratación indefinida ha crecido cerca de un 45%, con 233.620 contratos de este tipo, frente a los 161.606 firmados en el mismo periodo de 2010.